Los ácaros o arañas rojas, son una plaga común en muchos cultivos de invernadero y de campo abierto. Si no se identifica y controla a tiempo podría ocasionar pérdidas significativas.
¿CÓMO IDENTIFICAR LOS ÁCAROS?
Existen muchas especies y subespecies de ácaros. Los más comunes incluyen el ácaro de dos manchas (Tetranychus urticae) y la araña roja Carmín (Tetranychus cinnabarinus).
El ácaro de dos manchas suele ser verdoso, pero las hembras tienden desarrollar un color rojo durante el invierno. Poseen dos manchas en los laterales de su dorso (que son, de hecho, acumulación de desechos corporales). Los ácaros Carmín adultos son rojizos.
El color de los huevos de los ácaros varía de blanco claro, transparente y brillante a color cremoso pálido. Los huevos se vuelven de color amarillento en etapas posteriores.
¿CÓMO AFECTAN LAS CONDICIONES AMBIENTALES EN LOS ÁCAROS?
El clima preferido por los ácaros es el cálido y seco, por lo que aumentar la humedad y disminuir la temperatura puede proporcionar una buena protección de sus cultivos.
Bajo condiciones de alta humedad, la tasa de reproducción de los ácaros se reducirá significativamente.
La temperatura es un factor importante en la tasa de crecimiento de los ácaros. A medida que aumenta la temperatura, aumenta el número de huevos puestos, pero disminuye cuando aumenta la humedad.
La salinidad del suelo y del agua incrementa la infestación con ácaros.
LOS ÁCAROS SE REPRODUCEN RÁPIDAMENTE
Los huevos pueden eclosionar dentro de tres días y alcanzar madurez incluso dentro de 5 días, dependiendo de las condiciones. Una hembra puede poner hasta 20 huevos por día y su vida útil varía de dos a cuatro semanas, durante las cuales deposita cientos y hasta miles de huevos.
Una hembra madura puede engendrar una población de miles de ácaros en un mes o incluso menos tiempo.
Los ácaros se alimentan de la savia de la planta. Perforan las hojas con sus piezas bucales. Las hojas dañadas muestran marcas punteadas grises y amarillas, que eventualmente resultan en la deshidratación de las hojas. En casos severos, las hojas probablemente caigan como resultado del ataque de los ácaros. Si no se tratan adecuadamente, las plantas eventualmente morirán.
¿CÓMO DETECTAR LOS ÁCAROS?
Al comienzo del establecimiento de la colonia es muy difícil ver los ácaros a simple vista.
Por lo tanto, es muy recomendable examinar las plantas sospechosas con una lupa.
Los ácaros suelen asentarse en la parte inferior de las hojas, donde depositan sus huevos.
Producen una tela de seda para protegerse, tanto a sí mismos como a sus huevos, de sus enemigos naturales. Esto también les permite moverse entre las distinta partes de la planta.
Cuando la tela de los ácaros es visible, es una clara indicación de una colonia establecida y de un alto nivel infestación en el lugar donde se ve la tela.
No confundas la tela de araña roja con tela producida por arañas.
TRATAMIENTO Y CONTROL DE ÁCAROS
Existen varios tipos de tratamientos posibles:
Pesticidas orgánicos: hechos de fuentes orgánicas para reducir la tasa de reproducción. Por ejemplo el aceite de Neem.
Control biológico: utiliza organismos vivos para el control de ácaros. El control biológico se refiere al uso de insectos benéficos u hongos, enemigos naturales de los ácaros, como por ejemplo los ácaros depredadores, los trips depredadores, mariquitas y chinche pirata.
Plaguicidas químicos: Una amplia variedad de distintos tipos de agentes químicos ayudan a controlar los ácaros.
Su velocidad de reproducción acelerada, permite a los ácaros araña desarrollar rápidamente una resistencia o tolerancia a los pesticidas químicos, por lo que se requiere una rotación entre los productos químicos a utilizar, así como distintos modos de acción.
También es importante rotar los acaricidas que matan los huevos de los ácaros con acaricidas que controlan las etapas activas: ninfa y ácaros adultos.
Otra consideración importante es sí el material aplicado es translaminar o de contacto. Los acaricidas de contacto deben aplicarse de tal manera que las hojas estén completamente cubiertas por el acaricida, especialmente por el lado inferior de las hojas.
Al usar insectos benéficos (control biológico), es importante evitar los productos químicos, ya que son tóxicos para ellos.
PREVENCIÓN DE ÁCAROS
La prevención es mucho más difícil en producción en campo abierto, pero la producción en invernaderos permite a veces controlar la humedad, bajar la temperatura, usar ropas y herramientas limpias.
Es muy importante vigilar las plantas por lo menos una vez a la semana para detectar los ácaros lo más pronto posible, antes de que la infestación sea grave.
En un entorno controlado, un tratamiento combinado de mayor humedad, así como control orgánico puede obtener resultados altamente efectivos.
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